
A medida que los días son más largos y soleados, estarás más ocupado en el jardín, eliminando maleza, plantando y segando. Pero, igual que en verano es un momento de rápido crecimiento, en otoño y en invierno las plantas y los árboles están adormilados. Por eso, cuando se acerca el final del año, la clave está en preparar y nutrir el terreno. Con el tiempo, descubrirás lo que funciona mejor en tu jardín y tendrás infinidad de razones para salir al aire libre y disfrutar de la naturaleza.
Limpieza de primavera y siembra
Cuando surgen brotes verdes, las ramas se llenan de tallos y aparecen los bulbos, sabes que ha llegado la primavera. Ahora es el momento de sembrar plantas de flores anuales y de decidir cómo quieres diseñar los parterres.
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Siembra nuevas plantas herbáceas y arbustos
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Levanta y divide las plantas perennes (como hierbas ornamentales, ásteres, lirios y helenios) para evitar que se propaguen e invadan el terreno de otras plantas
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Anticípate a la eliminación de maleza y a la siega poniendo mantillo de compost en los bordes
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Poda las rosas, cortando a menos de 8 cm del crecimiento del año anterior
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Siembra plantas anuales resistentes (como caléndulas, amapolas, girasoles, crisantemos y guisantes de olor) directamente en el terreno rastrillado
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Siembra variedades más delicadas en un propagador calefactado y plántalas fuera después de la última helada
Tareas estivales
En el verano es cuando el crecimiento se acelera. Habrá una gran cantidad de hojas y flores coloridas que tentarán a las abejas y a otros insectos para polinizarlas. Elimina la maleza con frecuencia y asegúrate de que todo esté nutrido, regado y con un aspecto organizado. Después, simplemente siéntate, relájate y disfruta de tu jardín en su mejor momento.
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Cuando ya no haya flores, poda los arbustos que florecerán en primavera
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Siembra semillas de plantas perennes y propaga otras nuevas plantando esquejes en macetas con compost húmedo y arenoso
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Comienza a nutrir, regar y podar las flores marchitas de plantas herbáceas y rosales
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Siega con regularidad, aumentando la altura de la cuchilla de corte en clima seco para contribuir a que la hierba resista temperaturas más altas y evitar que el sol queme las plantas
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Coloca estacas en los tallos de plantas perennes altas como la espuela de caballero y las peonías pesadas para disfrutar de la floración antes de que caigan
Relájate durante el otoño
El otoño es cuando los animales buscan sitios para hibernar en las hojas caídas. Las bayas y el escaramujo maduran. Y, aunque el crecimiento comienza a ralentizarse, plantas como la verbena, las rudbeckias y las anémonas japonesas continúan floreciendo y llenando de color zonas sombrías al final de la temporada.
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Resguarda las plantas tiernas en el interior antes de las heladas
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Planta bulbos de primavera, árboles caducifolios, arbustos de raíces al descubierto, rosales, plantas de cobertura y trepadoras
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No cortes las cabezas de las semillas: déjalas para las aves hambrientas
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Limpia las hojas del césped y los caminos, pero mantén una pila o dos para la fauna
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Toma esquejes de madera dura de arbustos y rosales y cultívalos en macetas de compost que se pueden dejar en el exterior, en un área protegida
Tómate un descanso en el invierno
El jardín está ahora en su fase latente y debes concentrarte en proteger a las plantas de las inclemencias del tiempo y de terminar trabajos en preparación para la primavera. Disfruta en este tiempo de arbustos y árboles de hoja perenne, de las bayas que queden y de las plantas estructurales en el jardín.
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Eleva los recipientes de terracota con patas para evitar que se agrieten con la escarcha
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Planifica el próximo año de jardinería y haz los pedidos de semillas
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Limpia el invernadero, las herramientas de jardín y ordena el cobertizo
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Haz abono y recicla los residuos muertos
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Coloca las plantas con flores de invierno como el ciclamen y el eléboro (rosa de Navidad) en jardineras de ventanas