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Podar árboles no es lo mismo que podar plantas y supone tener en cuenta una serie de aspectos totalmente distintos. Si bien la poda de plantas puede mejorar su bienestar, la poda de árboles en realidad puede poner en peligro su salud. Hemos elaborado una guía sobre cuándo y cómo podar tus árboles.
Al podar un árbol, en realidad lo estás lesionando. El árbol tiene que emplear una valiosa energía para curarse y corre el riesgo de que contraiga enfermedades por las heridas abiertas. Por lo tanto, es importante evaluar cuándo es apropiado podar un árbol.
Cuándo podar
Si hay ramas muertas o rotas que es necesario eliminar
Si las ramas están enredadas, los fuertes vientos podrían hacer que las ramas se golpearan entre sí y que el árbol sufriera heridas a través de las cuales podría contraer enfermedades.
Si el árbol es inestable y puede suponer un riesgo para las personas, los animales, la propiedad u otras plantas
Si las ramas tienen una infección fúngica o parasitaria, o colonias de insectos que es necesario eliminar
Cómo podar
Elimina siempre la rama completa, no podes solo la punta o la parte superior del tallo principal
Al cortar, deja una sección de aproximadamente 1 a 2 cm donde la rama se una con el tronco para dejar que el árbol cierre fácilmente la herida.
Asegúrate de usar siempre herramientas limpias y estériles para evitar que se introduzcan patógenos en la herida.
Por lo general, es mejor podar a principios de primavera, en el momento en que salgan las primeras hojas. El árbol comenzará a recuperarse inmediatamente de la lesión y tendrá tiempo para cerrar las heridas antes de que llegue el otoño y el invierno y, de esta manera, se evitará la introducción de moho y parásitos.
Nunca elimines más del 30% de la vegetación a la vez. Si necesita eliminar más, espera hasta el año siguiente para que el árbol tenga tiempo de recuperarse.
