Frank vive con su mujer, sus dos hijos y su perro Ernie en Muenster, Alemania. La familia tiene un hermoso jardín de unos 1500-1800 m², que consta de varias zonas para sus diferentes aficiones, como el yoga, el cine al aire libre, o pasear, así como de espacios tranquilos para tomar un café por la mañana.
La vida antes del robot cortacésped
Debido a las grandes dimensiones del espacio verde, Frank invertía antes entre 2 y 3 horas cada dos sábados para mantener el césped en forma. Aunque su tractor cortacésped era eficiente, Frank necesitaba un cambio. Ya no quería estar atado a una sesión de corte quincenal, hiciera el tiempo que hiciera.
Como la familia tiene amigos que ya poseen un robot cortacésped, se interesaron por la idea de comprar uno ellos mismos. Sin embargo, Frank tenía dudas sobre la idoneidad de su jardín, ya que se mantiene de forma más orgánica con ramas caídas de vez en cuando y, sobre todo, le preocupaba que el robot pudiera acabar en el río, que pasa justo al lado de su césped.
En consecuencia, Frank concertó una cita en una tienda para informarse sobre las distintas opciones de robot cortacésped y acudió con la mente totalmente abierta.
Debido a la particular disposición de su jardín, el vendedor le recomendó STIGA y así comenzó la nueva etapa de Frank en el mundo de la jardinería.
La experiencia con el robot cortacésped
Durante la cita, Frank se enteró de que no todos los robots cortacésped funcionan exclusivamente con cable perimetral. Para su jardín, con su particular disposición y dinámica, un robot cortacésped autónomo era claramente la mejor idea. La familia puede cambiar las distintas zonas, desplazar las zonas de estar a su antojo y el robot se adaptará sin problemas.
Cuando nos reunimos con Frank, su robot autónomo lleva varias semanas cortando el césped. Se han establecido algunas zonas de seguridad a lo largo del río, donde el robot no corta y Frank corta de vez en cuando manualmente en una rápida sesión de 15 minutos después del trabajo. Destaca que este es exactamente el tipo de libertad que estaba buscando. La facilidad de configuración y cambio de las diferentes zonas de corte a través de la aplicación STIGA.GO es otro punto a favor del que disfruta la familia.
La instalación y gestión del robot a través de la app STIGA.GO es sencilla y se puede acceder a la información e intervenir, si es necesario, a distancia.
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